Conducción en la nieve, seguridad y adrenalina

Conducción en circunstancias extremas. Si escuchamos esta definición, inmediatamente la asociamos con un accidente o con una situación desagradable. Cuando un conductor se enfrenta a un suelo nevado o con hielo, puede suponer un problema. Sin embargo, si se sabe como actuar ante una situación de este tipo, el nivel de seguridad se incrementa. Y, rizando el rizo, puede llegar a convertirse en una deporte. La conducción en nieve es una práctica que gana adeptos por momentos. Ya hay estaciones en España con circuitos específicos para aprender a conducir en situaciones extremas.

Conducción extrema en Astún

Es el caso, por ejemplo, de la estación de Astún, en el Pirineo Aragonés (https://www.ford.es/compra/explora/experiencial/snow-driving?), donde Ford ofrece un Curso de Conducción Extrema en Nieve. Está dirigido a personas que busquen descargar adrenalina, amantes del volante, de la aventura y de la velocidad. Situado a más de 2.000 metros de altitud, el circuito se convierte en un espacio único en el que poner a prueba todos los modelos 4×4 de la conocida marca de automóviles.

La conducción en hielo y nieve se ha convertido en toda una experiencia. La posibilidad de poder manejar un coche en condiciones extremas, derrapar, esquivar y enfrentarse a condiciones de adherencia mínima resulta muy atractiva para cualquiera que frecuente lugares con condiciones meteorológicas adversas. Sobre todo si después se pueden aplicar los conocimientos adquiridos al día a día.

Ordino Arcalís, en el Pirineo Andorrano, también cuenta, esta temporada, con un circuito de conducción extrema. Está situado a pie de pistas, también a cota 2.000 e, asimismo, de la mano de Ford.

Distintos niveles

En este caso, se trata de una escuela, a la que se puede acceder independientemente del nivel de conducción que se posea. Existen distintas posibilidades: por un lado, se aprende a conducir con nieve. Este curso está indicado para personas que viven en lugares donde es frecuente tener que enfrentarse a esta situación. Por otra parte, se puede optar por la conducción deportiva. Es decir, aquella que se ha convertido ya en un deporte con multitud de seguidores. Es la actividad ideal para los amantes del motor, de la nieve y de las situaciones límite. Toda una experiencia que, de momento, se puede disfrutar en España en lugares contados. Algo parecido a lo que siente un piloto de competición.

Aunque en España es una actividad relativamente frecuente, en otros países europeos, como Francia, estos cursos ya cuentan con bastante tradición. Estaciones como Alpe d’Huez, Chamrousse o Val d’Allos los tienen incorporados a su oferta habitual de actividades.

En España, cada vez son más los que demandan este tipo de servicios, bien sea por diversión, bien por seguridad.